Fue en el año 1949 cuando el hostelero Pascual Bordes decidió abrir un nuevo restaurante en Dénia. Nacía "Vino El Marino" en el tramo final de la calle Tallandé, que después pasaría a
llamarse Patricio Ferrándiz. Allí, junto al puerto y en la plaza del Oculista Vicente Buigues, permanece El Marino. Los hijos y nietos de Pascual Bordes han mantenido la llama del negocio
familiar a lo largo de estos años. En el siglo XXI ha sido Bati Bordes quien ha incrementado la variedad gastronómica en El Marino. Con la apertura de otro local (El Marino-Les Rotes, junto
al puerto deportivo de la Marina de Dénia y la playa de la Marineta Cassiana) introdujo los arroces para completar la oferta culinaria basada en tapas y marisco.