El sol es muy agradecido en septiembre. No molesta. Te da calor cuando la brisa comienza a enfriar tu cuerpo tras el baño en el mar. En Dénia tenemos muchos amigos que viven en la misma playa y la disfrutan con este tiempo. En este mes los que pueden trabajan y los niños van al colegio. La costa pues queda en manos fundamentalmente de los jubilados, de los estudiantes universitarios, que todavía no han empezado las clases, y de la gente que, desgraciadamente, no encuentra ocupación laboral.
Es entonces cuando en el litoral norte (Punta del Raset, les Marines, les Bovetes, els Molins, l'Almadrava i les Deveses) se llena de cañas de pescar. Son unos atardeceres mágicos con el sol más tenue, poca presencia de bañistas y ganas de compartir charlas con los amigos, leer libros o escuchar la radio.
Hay indicativos inequívocos sobre el éxito en la pesca. Un cubo boca arriba –desde la lejanía del caminante– tiene pieza segura. Un cubo boca abajo significa que el pescador «fa porra» (hace porra) como decimos por aquí si hay fracaso en la pesquera.
En el litoral sur no se puede pescar al estar protegido (la Reserva Marina del Cap de Sant Antoni). Pero los amantes del buceo aprovechan la tranquilidad de las calas para observar y fotografiar los bancos de peces, las especies más grandes que se acercan a las rocas y que son difíciles de ver en el bullicioso agosto. Los paseos en les Rotes suelen ser muy agradables en esta época del año. No son pocos los amigos que tras recorrer a pie cinco kilómetros junto a la costa después se quedan a cenar con nosotros en El Marino-Les Rotes o El Marino-Port.
Septiembre es un mes para disfrutar en Dénia. Quien lo ha probado como periodo vacacional repite. ¿Quieres vivir los motivos?
Un saludo.
El equipo de El Marino
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